“Alicia se coló por la boca de la madriguera, sin pensar ni un solo instante en cómo podría salir de allí”. Lewis Carroll

lunes, 9 de mayo de 2011

CARTA A JESÚS ARELLANO
 
Desde hace años, Jesús,
el corazón me rebota loco entre las sienes
y ando por los rincones escondiendo al sollozo.

Estreno una sonrisa cada mañana
y pido limosna en todas las esquinas,
porque ¿quién va a prestarme su vida,
su amor, o su Dios?

Tengo que comprármelos yo misma, y no me alcanza.
Y todo esto que escondo y espero y que no llega,
es la razón que me desangra dentro.

A veces ocurre que de tan hambrientos
inventamos el sueño, la esperanza...
y mortalmente heridos, agonizamos por todos los hijos
que se nos quedaron dentro,
y por las palabras desquebrajadas,
presas entre los molares apretados del miedo;
las que luchan por sobrevivir
y a veces se nos caen de la boca
como un aborto ciego y doloroso.

Algo se rompe acá dentro y pienso,
me estoy vaciando viva.
Todos los adioses se agolpan y me miran
a mitad de la noche.
Tomo mi cobija de silencio, entonces,
y camino arrastrándola por los pasillos de la locura
y no me muero, Jesús,
y me siento a la orilla,
pidiendo se me ayude a balancear mi vida,
antes de irme
y tiemblo y nadie escucha, huyen con espanto,
mientras yo juego a la pelota con la muerte,
lanzándola como pequeña brasa de una mano a otra.

Y no me muero, Jesús, y no se muere una,
hace sólo el ridículo con su pequeña muerte
que es sólo una niña azorada,
llorando por todos los que de veras mueren sin
derecho.

Enriqueta Ochoa D. R. ©
El Retorno de Electra, México, SEP, 198.

Fotografía: Angélica Santa Olaya D. R. ©

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Impresionante... por qué el dolor será tan bello, sublime cuando es cierto? Imprescindible este Poema, Alicia, no lo conocía... gracias por ello... mi admiración y cariño...
Tirimasil

LABERINTO ALADO dijo...

Sí, es un poema impresionante... fuerte... duro... cierto... cuando la poesía es auténtica se siente... se sabe... Los fuegos artíficiales y las florituras, por muy barrocas que sean, si no tienen como raíz la experiencia real, no convencen al lector. Bueno, al menos a lectores como Alicia... exiliada de todos lados por defender la autenticidad y la libertad... Gracias por tu lectura y tu comentario. Coincidimos... también en la admiración y el cariño...

Alicia...

Anónimo dijo...

"Exiliada de todos lados por defender la autenticidad y la libertad..." No de mí, Alicia, o de los que te conocen y valoran lo que eres y haces, tu lucha consecuente con la realidad, tan dura a veces como la que denuncia esta joya literaria... mi admiración y cariño se sostiene también en eso, no solo en tu palabra...
Un fuerte abrazo...
Tirimasil

Anónimo dijo...

"Exiliada de todos lados por defender la autenticidad y la libertad..." No de mí, Alicia, o de los que te conocen y valoran lo que eres y haces, tu lucha consecuente con la realidad, tan dura a veces como la que denuncia esta joya literaria... mi admiración y cariño se sostiene también en eso, no solo en tu palabra...

Un fuerte abrazo...

Tirimasil

LABERINTO ALADO dijo...

Gracias querido... es una alegría inmensa saberse no sola en esta lucha en la que la vendimia de principios y la descalificación del trabajo femenino es el pan nuestro de cada día. En pleno siglo XXI... Ja...

Un beso,

Alicia...

Tirimasil dijo...

Coincido querida... Muchas veces, se descalifica o menosprecia al otro, a la mujer en este caso, cuando tiene razón y nos pone en evidencia o simplemente es mejor que uno mismo y se recurre a tópicos para silenciar la competencia o sostener una desigualdad tan injusta como nítida y rotunda... poco a poco esta humanidad irá cambiando... mejor reírse...
Un beso...

Tirimasil

LABERINTO ALADO dijo...

Así es querido... mejor reírse... Y bueno, creo que exageré al decir "de todos lados"... jeje... de muchos sería lo correcto... Y sí, para la mujer la lucha es doblemente difícil, pero las ganas no merman... al contrario... Así que aquí seguimos en el camino; neceando con lo propio y apoyando la palabra de grandes poetas como Enriqueta Ochoa que sufrieron en carne propia el soslayo a ultranza... Estás querido Tirimasil... estás... como siempre... como cada poético y luminoso día... Gracias por ello... Te abrazo con mucho cariño y complicidad...

Alicia...