“Alicia se coló por la boca de la madriguera, sin pensar ni un solo instante en cómo podría salir de allí”. Lewis Carroll

miércoles, 31 de marzo de 2010




¿Será que tus letras tristes
han dejado la última lágrima
sobre el deseo que se fue
agitando sus alas al horizonte?

¿Será que los sones grises
elegantones y de corbata,
solemnes ante el silencio,
han cantado su retirada?

¿Será que irse era no volver
y por no volver, las vocales,
lloran aguerridas tras el adiós
que no dieron las consonantes?

Sea lo que deba ser 
un adiós sonando como una impronta,
un testigo silencioso de aquello
que no quiso ser dicho nunca,
un hola disimulado,
tímido, inerte,
como las manos del hombre ahogado
que se hunden en el inmenso mar
de los que no tuvieron oportunidades... 


Fotografía: Angélica Santa Olaya D. R. ©

jueves, 25 de marzo de 2010


HOMENAJE AL MAESTRO 
SAÚL IBARGOYEN

El Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CONACULTA)
del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA)

llevará a cabo una

CEREMONIA DE RECONOCIMIENTO
A LA TRAYECTORIA LITERARIA

de

SAÚL IBARGOYEN

el domingo 28 de marzo a las 12 PM 
en la Sala Manuel M. Ponce

LECTURA DE POESÍA A CARGO
DEL AUTOR


PASAR

Es la gente
que regresa a pasar
con el distinto
pan de siempre:
¿qué telas y pieles
y cueros delicados
se conmueven
bajo presiones lunares
y soles de gélida angustia?
Las hierbas son así destituidas
porque cada huella
está hecha
por un pueblo completo
de zapatos descalzos.
Y pasamos nosotros
a impulsos de vértigo
de durísima sombra.
Son las gentes
que regresan tenaces
a pasar.
Ya muchos cantan.

Saúl Ibargoyen D. R. ©

"Poemar", México 2007.

domingo, 21 de marzo de 2010


ZAPATOS ROJOS EN ZARABANDA


Ayer fue la presentación del número 3 de la revista ZARABANDA de la Escuela de Escritores de la Sociedad General de Escritores de México (SOGEM).  Luego de que casi cuarenta generaciones de potenciales escritores salieran de ahí; por fin alguien decidió tomar al toro por los cuernos y editar una revista con el trabajo de la gente que ahí se está formando o se formó.  Esas personas fueron Andrea Mejía Rojas, Claudia Islas Coronel, Elia Sánchez Crotte y Rodrigo Méndez Salinas (no soy feminista radical, pero ¿se fijan como hay tres chicas y un chico?  No hago ninguna aseveración, sólo lo hago notar).  Una muy agradable sorpresa, pues, que la Escuela de Escritores de SOGEM tenga ya una revista.  En este número, dedicado a los zapatos rojos, encontramos un gato que se lame la nostalgia maullándole a las zapatillas rojas de su ama cuando está fuera de casa y que se nos aparece, a manera de fantasma, en un caligrama; un profesor de literatura enamorado de los rojos y tiernos zapatitos de una alumna católica y romana del colegio donde imparte sus clases; unos anárquicos Converse rojos que no han sido lavados en diez años, pero que son bastante confiables y colaboran a que un reportero logre una gran entrevista, aunque luego, al llegar a la oficina, tenga que mudar los tenis por zapatos; un hombre guapísimo enloquecido por los zapatos rojos de una mujer a la que conquista y que, cuando por fin la tiene bajo las sábanas, no puede tocar ni gozar nada excepto los zapatos rojos que no lo defraudan porque  son unos muuuy efectivos zapatos rojos, la dueña se conformará con la gloria de haber tenido a aquel Adonis literalmente a sus pies... Alicia la Necia no podía faltar en este número así que se hace presente con el poema Vienes que ya fue publicado en este blog razón por la cual nos contará una de sus minificciones donde no pueden faltar, por supuesto, los zapatos rojos:

TRUEQUE

- Me llamo Alicia. ¿Y tú? 
-  Dorothy.  
– Si me das tus zapatos rojos te doy mi reloj ahogado en una taza de té.  
- ¿En una taza de té?   ¿Quien querría ahogarse en una taza de té? 
- Algún “alguien” inglés, supongo.  ¡Vamos!  Es más seguro este reloj que tu camino amarillo.
- ¿Y para qué quiero yo un reloj ahogado en una taza de té?
- Para que el tiempo no pase.  Así podrás jugar con tus amigos todo lo que se te antoje.
- Está bien. 

Alicia, ingenua, calzó los zapatos rojos de la bruja del Este sin saber que en el país de las maravillas no había caminos amarillos y Dorothy, que se quedó sin amigos porque nadie la reconoció sin sus zapatos rojos, caminó descalza, por Kansas, durante toda la eternidad.  


Angélica Santa Olaya D. R. ©
México, D.F. marzo 2010.

lunes, 15 de marzo de 2010

PRESENTACIÓN DE "JAURÍA" DE JAVIER GAYTÁN




VersodestierrO
presenta

Jauría

del poeta Javier Gaytán

Miércoles 17 de marzo en
Hostería La Bota.
San Jerónimo 17, casi esquina Isabel la Católica.
(a una cuadra del metro Isabel la Católica)
7 PM

Presentan
Angélica Santa Olaya
Ileana Garma
Adriana Tafoya
Iliana Godoy
Modera: Andres Cardo

Música en vivo: Bárbara Oaxaca
Fondo Pictórico: Felipe Gaytán
En la compra del poemario Jauría
del poeta Javier Gaytán, se dará de obsequio
el libro Los Alumbrados de Manuel Becerra Salazar.

La poesía no es una camisa de satín

Allá nos vemos!!!


Fotografía: Angélica Santa Olaya D. R. ©

domingo, 7 de marzo de 2010


Y BUENO, AQUÍ VA porque es necesario, porque la violencia viene de todas partes, pero principalmente de los fuertes, de los que empuñan las armas antes que la razón o el corazón contra los débiles... como las mujeres, como las ancianas, y más si son pobres y para colmo indígenas... Ay Ernestina!  Tú tenías todo eso encima... Para ti, en este Día Internacional de la Mujer.  


ERNESTINA

Pero qué necia eres Ernestina… ¿no te digo?
¿A quién se le ocurre acabarse las uñas
escarbando el sueño para atrapar lombrices? 
¿A quién se le ocurre treparse a los árboles
nomás para comer los mangos verdes?
¿A quién se le ocurre vivir tantos años
dueña y señora de tus propios pasos?
¿A quién se le ocurre desafiar a las piedras
con esa reciura que el sol del trópico sembró en tus arrugas,
con esa mirada de lince que no necesita disfraces
ni municiones para cazar?
¿Qué no ves que tus manos terrosas
amargan el bocado del que empuña el arma
para justificar el pan de cada día?
Vete nomás ahora…
Ahí, con las entrañas de fuera
alimentando a los zopilotes,
dejando tu necia necedad tatuada
en la memoria de la tierra que te oyó gemir,
regalando los ríos de tu sangre
a la precoz eyaculación de los buitres,
tocando la puerta cerrada de un dios menor
que afila los colmillos
en las desplumadas alas de un águila
que perdió el pico bajo una lluvia de monedas;
un dios menor que engulle a sus hijos
para no perder la silla de oro.

Ay Ernestina…
deja de remover las piedras buscando lombrices,
los gusanos más grandes están aquí nomás tras lomita
royendo huesos y lamiendo billetes bajo el pinar.

Angélica Santa Olaya D. R. ©
México, D.F. febrero 2007.


Fotografía: Angélica Santa Olaya D. R. ©

sábado, 6 de marzo de 2010

CORRESPONDENCIA DE ALICIA

Alexis, no me escribas,
no me uses como imagen tutelar de tu metáfora,
que el viaje literario en que me viste
para mí fue pesadilla,
nunca salí del horroroso universo victoriano.

Ahora estoy bien, descanso bajo tierra,

blancos conejos, umbrosas madrigueras
me acompañan. No hay nostalgia,
tiempo ha que ya vagué tras el espejo,
pero ahora estamos todos muertos, como el dodo.

Y tú insistes en atribuirme más presencia

que la impresa en esta tinta carcelaria.
Pero amor, convéncete, soy fantasma del deseo,
una especie de romántico anhelo de las ansias.

Y bien, has de saber que nunca él

hizo gesto de tocarme, le bastaba acariciarme 
con su cámara.
(Yo bajaba algún tirante de mi blusa,
el hombro joven, dorado y reluciente,
deslumbraba).

De sonrisas sabes tanto como él,

¿Qué luz de doce años
puedes ver en mi sonrisa?
Me ves reclinada en una cerca,
inquietante como nínfula del cine.

Pero él, y yo, casi una niña;

contempláramos ansiados y miedosos nuestro ímpetu,
reemplazáramos deseo por los juegos,
o bien secretamente revolcáramos el cuerpo por los prados,
es lo mismo, nunca salí, nunca salimos
del espantoso universo victoriano.

Alexis Figueroa  D. R. ©

Chile. 

lunes, 1 de marzo de 2010


ALICIA EN EL GUARDAGUJAS

Una excelente edición del Suplemento Guardagujas, del diario La Jornada de Aguascalientes, vió la luz el día de hoy 1o. de marzo de 2010.  En él diversos textos -ensayos, cuentos, poemas e incluso una Impertinencia situacional escrita por Alicia la Necia- que se atrevieron a posar sus absurdas letras en las páginas de este suplemento cultural a la cabeza de Edilberto Aldán (a quien, por cierto, felicito aquí porque, justo hoy, se anunció la publicación de uno de sus relatos en la Revista Casa del Tiempo de la UAM) y Alberto Chimal, maestro de literatura ficcional.  Encontraremos  textos procedentes de  la especialista en minificción argentina Gilda Manso. Un poema de Ricardo Pohlenz y un interesante análisis del proyecto científico nuclear ALICE que intenta, ahora mismo, con la participación de diversas universidades explicar este universo de maravillas en que los protones y neutrones son, también, susceptibles de caer en los abismos que zanjan la razón y el sinsentido.  Porque la Alicia de Lewis Carroll sigue tan viguente como hace doscientos años instalandose en todos los rincones del mundo donde hay un gato sin cuerpo que siempre salva la cabeza y una que otra Alicia buscando respuestas entre versos o rascándole las orejas al silencio o metiendo la nariz en alguna madriguera en la búsqueda vital de un sueño para colocar debajo de la almohada antes de dormir con la esperanza de encontrar, al otro día,  "un pecado a cambio" de tanto esfuerzo.  Cliquen AQUÍ para asomarse al Guardagujas de Alicia.  Disfrútenlo.