“Alicia se coló por la boca de la madriguera, sin pensar ni un solo instante en cómo podría salir de allí”. Lewis Carroll

jueves, 16 de abril de 2009

TAN BLANCA

Era tan, pero tan blanca. Tan luminosa, pero tan luminosa, que nadie la veía bajo la luz del sol. Todos los días se miraba en el espejo y se inventaba para sentir que existía. Un día, su luz exabrupta irrumpió entre los pliegues de la noche empujando a las sombras que se deslizaban sobre la faz de la luna y bajo los candentes rayos del sol. Tomó una pluma y escribió un violento mensaje a su vecina que tenía la piel del color de las sombras. Luego escribió la palabra “anónimo” colocándose una máscara que la identificaría, de ahí en adelante, a cualquier hora del día o de la noche. Desde entonces, tiene un rostro. El rostro que habita la más cruenta y retorcida de las oscuridades; el de la cobardía.

Angélica Santa Olaya D. R. ©

2 comentarios:

lucero dijo...

Me gusta este cuento! La cobardia en verdad es algo serio,aunque tambien pienso que es inherente a la condicion humana y depende del contexto, pero es obvio que la pobre Blanca-luminosa es o la convirtieron en monstruo.
La vida esta llena de sorpresas; seres blancos, se tornan oscuros por razones tan inexplicables o quizas atraidos por el misterio,de las sombras, que al parecer no son sombras comunes porque viven bajo el calor del sol..A veces la cobardia puede tener muchos rostros y quizas tambien Blanca desconocia que su vecina tenia la piel del color de la sombras..en fin.. pueden ser tantas cosas como interpretaciones se quieran, pero lo real es que es muy interesante este cuento, sobre todo por su mensaje didactico!
Lucero.

LABERINTO ALADO dijo...

Qué tal Lucero. Pues sí la mujer luminosa se convirtió en monstruo, pero ella solita se puso la máscara. Y sí, la cobardía puede adoptar muchos rostros, pero sólo uno es el verdadero: el de la propia cobardía. El anonimato es una de sus más viles manifestaciones. En mi pueblo dicen las abuelitas: "tira la piedra y esconde la mano". No hay ser más asqueroso que el cobarde.
Gracias por leer. Ah! y recuerda que las sombras no viven sólo en la oscuridad; se hacen más visibles gracias a la luz del sol.
Alicia.