“Alicia se coló por la boca de la madriguera, sin pensar ni un solo instante en cómo podría salir de allí”. Lewis Carroll

martes, 8 de septiembre de 2009


LIBERTAD CRUZANDO OCÉANOS

He vuelto a algunos viejos poemas motivada por la conversación con un amigo que se encuentra al otro lado del océano y nuestras reflexiones acerca de las consecuencias de ir en busca de la libertad que es esencial al hombre. Dejo aquí este poema que escribí hace unos años luego de mi visita, con un grupo de poetas, a una cárcel de Brasil donde otro hombre me regaló su historia -de inocencia como muchas; porque los verdaderos delincuentes están, casi siempre, detrás de grandes escritorios de caoba- un poema escrito por él y un cojin en forma de corazón hecho también por él en el encierro. El hombre afirmaba que la lectura y la poesía mantenían a salvo su cordura porque el pensamiento no puede ser encerrado por nadie excepto por nosotros mismos. Yo sabía muy bien de lo que hablaba aquel hombre que mientras hablaba miraba la pequeñísima obertura de la celda mientras yo imaginaba que su voz se colaba entre los barrotes montada en un avión de papel que era lo único que pasaba entre ellos. El cojin es símbolo del amor que aquel hombre resguardaba del odio en el fondo de su alma. Desde entonces, ese cojín le hace compañía a la silla donde acostumbro leer mecida por los recuerdos. Salud amigos, mientras se pueda, por la vapuleada, utilizada y tan ansiada libertad...


AVIÓN DE PAPEL

Voz,
papel
alado
al viento.

Hombre,
capullo
enteco.

No hay mañana
sólo murmullo de tiempo;
el reloj no retrocede.

La voz se enjuta
bajo su sol de veinte por veinte
mientras su alma
en un poema entreteje.

Avión de papel
cruza fronteras
monta el viento,
atisba el otro lado
de la espera.

Espera
espera
es
pe
ra
.
.
.


Angélica Santa Olaya D. R. ©

"Habitar el tiempo"
México, Ed. Tintanueva, 2005.

Fotografía: Angélica Santa Olaya D. R. ©

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Los ojos que te oyen se quedan sin palabras pero te acogen en su vida. Llegas. No importa la distancia. Lo saben tus lectores, lo sienten tus amigos.

Un abrazo desde Canarias.

Domingo Acosta

LABERINTO ALADO dijo...

Gracias Domingo,

Tus palabras son una caricia para mi alma. Compartir y que alguien tome entre sus manos lo que ofrecemos. No hay mayor regalo.

Angélica

Anónimo dijo...

Holaaa @lis...

Lo que cuentas es muy triste pero tambien hermoso..
Y tu poema, por segunda vez me
exprime el alma hasta la ultima gota...Los que volamos en busca de libertad estamos presos en las esperas y las nostalgias...
Siempre celebro tu tierna
sensibilidad para acogernos en tu mundo infinito de amor ...
Gracias por existir !!

Paloma( MIAMI-FLORIDA).

LABERINTO ALADO dijo...

Gracias a tí Paloma, por abrir la puerta de tu alma a mis palabras.
Yo sé que tú también sabes de estas esperas...

Besos

Alicia

esquinaparadise.blogspot.com dijo...

Gracias Alicia por estas palabras tan bellas y por esa selección musical que has realizado con tanto gusto. Me has acompañado en la celda de mi necedad, he estado copiando poemas de José María Millares, muerto el día 8 pasado a sus 88 años.
Un abrazo lleno de emoción y locura
Antonio

LABERINTO ALADO dijo...

Querido Antonio,

Me alegra que te haya gustado la entrada y la "novedad" musical que les tenía preparada. Anoche me acosté a las 3 de la mañana peleandome con el ciberespacio, pero lo logré. Soy neófita en estas cuestiones, pero tengo a mi favor una cosa: Mi horóscopo chino es Tigre y soy 100% un Tigre: Una vez que muerdo, no suelto la presa. Y además necia, bueno... ya te imaginarás...

Esta es parte de la música que me gusta y que disfruto. Poco a poco iré metiendo más canciones y melodías.

Te acompaño en el luto por ese poeta amigo tuyo y te abrazo a la distancia que, como vemos, no es tanta gracias a la tecnología.

Besos,

Alicia

esquinaparadise.blogspot.com dijo...

Bicicletas marinas navegando las olas,
la nube hasta la cal roja del cielo, sin límites abierta,
dolida y esperando la mano oscura y fría
callada de la luz.

De Pájaros sin playa
José María Millares Sall.

Esto nunca muere.
Besos, Antonio.

LABERINTO ALADO dijo...

Antonio,

Hermosa imagen la de este poema.
La he visto claramente.

Por supuesto que la poesía no muere. Las ideas y los pensamientos perduran a través de las palabras mientras haya alguien, como tú, que se encargue de transmitirlas y otro que desee tomarlas entre sus ojos-manos.

Un abrazo fuerte,


Alicia

Anónimo dijo...

Amigos:
Brindemos por José María Millares...
Brindemos por la magia de la maravillosa libertad; bendita sea su fuerza solidaria. Sin ella se marchita todo lo que existe.
Alicia: Gracias por recordárnoslo...

Domingo Acosta

Clarice Baricco dijo...

Deseo que el viaje se gratificante.
Hermoso que te vas. A prepararse se ha dicho.

Abrazos.


Graciela B.

Anónimo dijo...

Angélica, qué gratísima sorpresa pues también es un reconocimiento a tu persona, a tu labor y a tu obra, que va a servir para que esta se difunda: ¡Viva!
Merecidísimo. Eso pensamos por aquí.
Un abrazo y ánimo.


Domingo Acosta

Ó dijo...

Me ha puesto muy contento leer esto.

Apenado estoy porque me alejé mucho de tu energía siempre positiva y hermosa.

Sigo en la lucha, sigo necio también.


Te mando un beso enorme, enorme.


Ó

EKO dijo...

Felicidades Angélica. Brinda por tus amigos con un rioja en la Gran Vía.

LABERINTO ALADO dijo...

Mi queridísimo Ó:

Qué alegría saber de ti!!!
Creí que había ido a vivir a otro país... Te extrañado... mucho... Me alegra que sigas necio y luchón.
Yo también deseo que la vida sonría para tí. Gracias por tu buena vibra.
Si andas por aquí, veámonos...
Besos muchos, necios y apretados, para tí,

Angélica

LABERINTO ALADO dijo...

Gracias EKO,

Lo haré. Brindaré por mis amigos y la buena voluntad de los necios. Suerte.

Angélica